En el Sahara se produciría la mitad de la electricidad global
Un grupo de especialistas de las universidades de Argelia y Japón propone convertir el desierto más grande del mundo en la mayor planta eléctrica, que hacia el futuro 2050 podría suministrar la energía a la mitad del globo.
Estos grandiosos planes se están desarrollando en el marco del proyecto 'Sahara Solar Breeder Project'. La base para los paneles fotovoltaicos utilizada en la instalación solar africana, será el mismo silicio que se extraerá de la arena del propio desierto. Según comentan los científicos, dentro de 40 años en ese lugar se podrán construir granjas solares que se extenderán a decenas de kilómetros y serán integradas de cientos de miles de paneles solares.
El proyecto actualmente está en la etapa de la investigación. Su jefe, el profesor Hideomi Koinuma de la Universidad de Tokio, comentó citado por physorg.com, que todavía nadie había pensado fabricar los paneles solares utilizando la arena del desierto. Se puede organizar su fabricación desde la propia ubicación. Hay allí hay tanta arena y tanta luz, que se podrá instalar granjas solares de varios tipos, las primeras producirían energía necesaria para construir las siguientes.
En cuanto a la transportación de la energía, se necesitarán cables superconductores de 500 kilómetros de largo para transferir 100 gigavatios (GW) de electricidad.
Pero en este camino habrá obstáculos. Por ejemplo, hará falta elaborar un método para combatir las tormentas de arena, resolver el problema del transporte y almacenamiento de nitrógeno líquido, necesario para el enfriamiento de los paneles, así como reducir el efecto del salto térmico en el desierto (por el día el mercurio sube hasta +50º C, y por la noche baja hasta cero).
En el 2011 los científicos japoneses piensan desarrollar en esta inhóspita zona una granja de energía solar de tan solo 100 kilovatios de capacidad, que servirá para probar las tecnologías en condiciones reales. Y en el futuro, el proyecto 'Sahara Solar Breeder Project' podría convertirse en un catalizador del crecimiento de la ingeniería y la industria norteafricana.
Anteriormente la compañía alemana Siemens en colaboración con varias otras informó sobre sus planes de realizar la iniciativa 'Desertec' que también presupone la creación de la planta de energía solar más grande del mundo en el mencionado desierto. Según sus cálculos, para el 2050 esta planta cubrirá hasta el 15% de las necesidades energéticas de Europa.
En el marco del proyecto se planea tender una red de cables de alta tensión por el fondo del Mar Mediterráneo para transferir la energía desde África del Norte hacia Europa, no solamente de las plantas de energía solar, sino también de energía eólica, que se podría instalar en espacios abiertos del desierto africano.
Sin embargo, algunos expertos creen que este proyecto no es realista, y que los 400.000 millones de euros necesarios para llevarlo a cabo es una suma demasiado alta, y además la transportación de la energía también resultará muy costosa. Según el jefe de la compañía alemana Vattenfall, Lars Josefsson, citado por Financial Times Deutschland, hay que utilizar la energía producida en África en este continente, y Europa debería producirla en su territorio.