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Activistas surcoreanos lanzan propaganda hacia Corea del Norte a pesar de las amenazas de Pyongyang
Un grupo de activistas consiguió lanzar en dirección a Corea del Norte globos de aire con folletos de propaganda, a pesar de la amenaza de bombardeo norcoreana.
Los activistas lograron lanzar el lunes unos 120.000 folletos con críticas al régimen norcoreano e información sobre la situación actual en los países árabes.
Las autoridades surcoreanas prohibieron el lanzamiento de panfletos después de que Corea del Norte amenazara con abrir fuego en el caso de alcanzar los folletos su territorio. La Policía bloqueó la carretera que lleva al parque de Imjingak, desde donde más de 50 activistas planeaban lanzar los panfletos. Sin embargo, unos 10 activistas pudieron lanzar los globos desde otro punto fronterizo con Corea del Norte, la isla Ganghwa.
El viernes pasado, Pyongyang declaró que abriría fuego contra Corea del Sur en caso de que la propaganda fuera lanzada. A diferencia de las amenazas anteriores, esta vez indicó la hora y el lugar exactos del ataque y dirigió un aviso de evacuación a la población. Las autoridades de Corea del Sur, a su vez, anunciaron que abrirían fuego como respuesta, alertaron a las tropas y desplegaron unidades adicionales de carros blindados y artillería en la región fronteriza. La administración de la ciudad de Paju dispuso mantener cerrado el parque Imjingak, desde donde los activistas suelen lanzar los globos con panfletos propagandísticos, hasta que estos renuncien a sus planes.
Las autoridades surcoreanas prohibieron el lanzamiento de panfletos después de que Corea del Norte amenazara con abrir fuego en el caso de alcanzar los folletos su territorio. La Policía bloqueó la carretera que lleva al parque de Imjingak, desde donde más de 50 activistas planeaban lanzar los panfletos. Sin embargo, unos 10 activistas pudieron lanzar los globos desde otro punto fronterizo con Corea del Norte, la isla Ganghwa.
El viernes pasado, Pyongyang declaró que abriría fuego contra Corea del Sur en caso de que la propaganda fuera lanzada. A diferencia de las amenazas anteriores, esta vez indicó la hora y el lugar exactos del ataque y dirigió un aviso de evacuación a la población. Las autoridades de Corea del Sur, a su vez, anunciaron que abrirían fuego como respuesta, alertaron a las tropas y desplegaron unidades adicionales de carros blindados y artillería en la región fronteriza. La administración de la ciudad de Paju dispuso mantener cerrado el parque Imjingak, desde donde los activistas suelen lanzar los globos con panfletos propagandísticos, hasta que estos renuncien a sus planes.
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